Una mirada a los elementos del habla que pueden (o deben) eliminarse al subtitular sin perder el sentido del mensaje: muletillas, repeticiones, titubeos, saludos de más, etc. Ideal para quienes creen que “todo tiene que estar” en los subtítulos.
Cuando se subtitula, muchas veces surge la duda: ¿debo poner absolutamente todo lo que se dice?
La respuesta es no. Un buen subtítulo transmite el mensaje, no necesariamente todas las palabras.
Frases o fragmentos que suelen sobrar:
- Saludos excesivos: “hola hola, ¿cómo va, todo bien, tanto tiempo…”
- Muletillas: “bueno”, “o sea”, “nada”, “tipo”
- Falsos comienzos o frases interrumpidas: “lo que yo digo es… bueno, no, o sea…”
- Lo que sí debe permanecer:
- Palabras clave para entender el sentido.
- Elementos que aportan tono o intención (cuando son relevantes).
- Expresiones que marcan emoción o énfasis
- Conclusión:
Subtitular no es copiar, es condensar el mensaje de forma efectiva. Saber qué eliminar es tan importante como saber qué traducir.